Parque Nacional del Manu, Perú 2006Desde los Andes hasta la selva bajaIntroducción El Parque Nacional del Manu es muy conocida por su biodiversidad. Con más de 1000 especies de aves representa una perla para los aficionados a las aves, pero la diversidad en general es impresionante para cualquier grupo taxonómico, tanto de animales y plantas. Este viaje fue la mejor experiencia de naturaleza hasta ahora, nos sentíamos como si visitáramos el corazón de la evolución, con sus más diversas estrategias de supervivencia, con cada especie tratando de estar siempre un paso por delante, sea explotando nichos, co-evolucionando con plantas forrajeras, competidores o enemigos. Sólo la estabilidad a largo plazo de los ecosistemas de esa selva tropical en el lado oriental de los Andes (que ha sido poco afectado por las épocas glaciales y otros cambios climáticos) ha hecho posible el desarrollo de una diversidad tan enorme de vida. Esperamos que futuras generaciones sigan teniendo la posibilidad de visitar estos ecosistemas impresionantes. En el viaje pasamos por casi todos los ecosistemas del Parque Nacional del Manu, comenzando desde el borde de la selva, el bosque enano, hacia el bosque nublado y descendiendo aún más hacia la selva baja. La gran diversidad de especies en el Manu se atribuye en parte al hecho de que Manu cubre una amplia gama de altitudes, desde aprox. 3600 m hasta pocos cientos de metros sobre el nivel del mar, cada uno con sus especies típicas y parcialmente endémicas. Este viaje ha sido organizado por IncaNatura, una compañía especializada en el turismo ecológico en el Perú. Juan Carlos Cárdenas fue muy gentíl dándonos informaciónes durante la fase de planificación y respondiendo a muchas preguntas. Y Percy Avendaño fue un guía excelente y muy paciente, a quien queremos dar las gracias aquí. Él hizo lo mejor para mostrarnos lo más posible en sólo seis días.
Cusco, Laguna Huacarpay y los Andes Después de salir del Cusco en coche a las 5:30 h por la mañana llegamos a la laguna Huacarpay una media hora más tarde. Además de diversas aves acuáticas vimos a Picaflores Gigantes (Patagona gigas) alimentándose y defendiendo su territorio. Visto que yo estaba especialmente interesado en Picaflores, dejamos la laguna después de una hora tratando de encontrar más sitios buenos para observar Picaflores en nuestro camino a través de los Andes. Encontramos buenos sitios para el Montañez Barbudo (o Ninfa Barbuda, Oreonympha nobilis), Colibrí Verde Colirojo (Metallura tyrianthina smaragdinicollis) y otros en el camino a Paucartambo. Parque Nacional del Manu, cerca de Tres Cruces En el camino a través de los Andes, donde alcanzamos una altitud de aprox. 3950 m, el paisaje estaba seco y a veces rocoso (en las partes altas dominadas por Ichu). Pero pocos kilómetros antes de llegar al borde de la selva tropical, es decir, antes de llegar a las laderas orientales de los Andes, el paisaje volvió a ser verde de repente. Al parecer la humedad de la selva tropical entra de vez en cuando en las valles próximas a la selva. Cuando por fin llegamos al borde de de la selva tropical, las nubes y una humedad fría nos rodeaba de repente, condensándose en gotas en todos los árboles, hierbas y líquenes. La humedad junto con los árboles pequños y arbustros llenos de líquenes y musgos, produjo un ambiente que está muy bien descrito por el término "bosque enano". Aquí en el borde superior del Parque Nacional del Manu nos detuvimos para almorzar y tomar fotos del Picaflor Rojizo Andino (Aglaeactis cupripennis), un Picaflor de alas bastante largas (que es una characterística típica para los Picaflores que viven en el aire poco oxigenado de los Andes). Como las flores son escasas en el bosque enano, los Picaflores pasan el menor tiempo volando, ahorrando energía. Después del almuerzo continuamos bajando y el bosque se puso poco a poco más denso y más alto. Cuando vimos los primeros helechos arborescentes sabíamos que habíamos llegado al bosque nuboso (bosque pluvial montano superior). Tuvimos la suerte de ver un grupo de Monos Lanudos (Lagothrix lagotricha) que lentamente pasaban de árbol a árbol con sus colas prensiles. Esperabamos ver al Quetzal, pero no tuvimos la suerte de verlo. Pero pudimos ver un Barranquero Coronado (Momotus aequatorialis, desgraciadamente demasiado lejos para tomar fotos). Poco después, llegamos a Cock of the Rocks Lodge, donde pasamos la noche. Cock of the Rocks-Lodge Información práctica: Electricidad sólo por la noche durante algunas horas (generador). Duchas con agua caliente (gas). Mosquitera disponible (cubriendo la cama). Como el nombre sugiere, Cock of the Rocks-Lodge es conocida principalmente por la arena (lek) en la que los Gallitos de las Rocas (Rupicola peruvianus) machos bailan para atraer las hembras. De hecho, el lodge ofrece una excelente oportunidad para observar este comportamiento muy interesante de los machos, cada uno bailando y gruñiendo en su rama propria, separado solo por pocos metros de los otros machos. Es aún más interesante cuando viene una hembra (que es marrón y más pequeña que los machos coloridos de rojo y negro), causando que todos los machos se fuercen todavía más bailando. La plataforma está a sólo pocos metros del lek y es un lugar único para la fotografía también, aunque es bastante oscuro durante la madrugada cuando empieza la actividad de los machos (accedimos a la plataforma antes del amanecer). Nosotros planeamos nuestro viaje para Septiembre, porque en ese periodo el comportamiento reproductivo del Gallito de las Rocas ya empieza pero todavía está poco antes de la temporada de lluvias, que comienza en octubre (esta decisión fue también buena para evitar mosquitos, tuvimos muy pocos, pero unos años más tarde visitamos la selva en la temporada de lluvias y era verdaderamente una pesadilla con los mosquitos). Sin embargo, los Gallitos de las Rocas visitan el lek también durante todo el año (al parecer para no perder su territorio en el lek). Pero para observar la mayor actividad es mejor ir en la época de la reproducción. El albergue en sí era el mejor lugar para la fotografía de Picaflores que he visto hasta ahora. Varios arbustos floreciendo y algunos comederos estaban atrayendo tantos de ellos que era difícil concentrarse en una especie específica. Las especies más abundantes fueron Taphrospilus hypostictus, Phaethornis guy, Discosura popelairii, Heliodoxa leadbeateri, Aglaiocercus kingi y Ocreatus underwoodii. Muchos de ellos no eran tímidos para nada, a veces chupando néctar en tan sólo un metro de distancia. La gente del lodge atrajo también varias Tangaras con algunas frutas (p.ej., Ramphocelus carbo). Más tarde vino también un Agutí comiendo las frutas y también un grupo pequeño de Capuchinos Negros (Cebus apella) visitaban el albergue, ofreciendo de nuevo una oportunidad excelente para tomar fotos. La abundancia increíble de vida no me dejó tiempo para el desayuno y llené todas mis tarjetas de memoria en una hora, así que antes de salir para dar un paseo en el camino principal tuve que copiar todos los archivos en mi disco duro. Camino a Atalaya Después de una caminata en la carretera donde tuvimos éxito buscando bandadas mixtas de aves (Tangaras, Carpinteros, Oropéndolas llamado así por su color dorado y la forma de sus nidos) procedimos a Atalaya, donde íbamos a continuar nuestro viaje con un bote. En el camino cruzamos varias áreas cultivadas o por lo menos parcialmente cultivadas. Después de un día en el bosque denso, intacta y virgen fue triste ver el cambio del paisaje causado por la actividad humana. Para la fauna, las próximas horas hacia Atalaya no estaban muy gratificantes. Hemos visto algunas especies de aves y un Armadillo de Nueve Bandas (Dasypus novemcinctus), atropellado por un coche. En Atalaya dejamos el coche y tomamos un bote para el resto del viaje. Este día, sin embargo, nos dirigimos sólo al Amazonia Lodge, que estaba muy cerca a Atalaya. Amazonia Lodge Información práctica: Electricidad sólo por la noche durante algunas horas (generador). Duchas con agua caliente (energía solar). Mosquitera no disponible (cubriendo la cama), pero mosquiteras en las ventanas. Amazonia Lodge es un lodge grande con un jardín relativamente amplio. El albergue ha sido construido en un bosque secundario, que era usada antiguamente para la agricultura. En consecuencia, la mayor parte del entorno estaba compuesto por plantas típicas de las fases tempranas sucesivas, por ejemplo con árboles de Cecropia. Cerca del lodge había también una pequeña montaña cubierta de bosque primario, pero porque empezamos a caminar por los alrededores del albergue, no tuvimos tiempo para visitarlo. A pesar de que habían varios comederos para Picaflores no vimos muchos Picaflores aquí, excepto por un Chrysuronia oenone poco tímido. El jardín ofrecía buenas oportunidades para la observación de varias especies de Tangaras (p.ej. Ramphocelus nigrogularis) y Oropéndolas (p.ej. Psarocolius angustifrons). A pocos metros del jardín había un árbol con un grupo de Monos Nocturnos (Aotus miconax) residentes. Más tarde en la noche un coatí (Nasua nasua) visitó el lodge cuando descansamos. En los alrededores vimos tucanetas (Aulacorhynchus prasinus) y aracaris (Pteroglossus castanotis), entre otras aves. Desde Amazonia Lodge a Manu Wildlife Center
El tercer día lo pasamos casi entero en el bote desde el Amazonia Lodge hasta Manu Wildlife Center, que está a unos 100 km de distancia.
En el camino vimos a varias especies de Martin Pescador, diferentes Garzas (Egretta thula, Ardea cocoi, Philherodius pileatus,
y otros más) y al Jabiru (Jabiru mycteria). En comparación con otras regiones de la selva peruana, donde la caza es un problema,
los animales en el Manu y los alrededores eran bastante mansos.
Ahora, al final de la estación seca, el río con su bajo nivel de agua estaba todavía lleno de troncos de árboles, que había caído al agua
por las aguas torrenciales durante la estación de lluvia, que cava cantidades considerables de tierra de las orillas del río. Es impresionante ver cómo
el agua forma el curso de los ríos y cómo cambia con el tiempo (mira p.ej.
estas imágenes de satélites del río Madre de Dios).
Generalmente, en las partes exteriores de los lazos de los ríos el agua rápido se lleva la tierra quitando terreno de la selva, mientras que en el
lado interior de los lazos la tierra se deposita formando un nuevo terreno en el que crecen comunidades sucesivas vegetales típicas.
Manu Wildlife Center Información práctica: Electricidad sólo por la noche durante algunas horas (generador). Duchas con agua caliente (gas). Mosquitera disponible (cubriendo la cama). Manu Wildlife Center no está ubicado en el Parque Nacional Manu, pero ofrece excelentes oportunidades para la observación de la vida silvestre. Los animales de todas formas no conocen las fronteras del parque y visto que la caza no parece ser un problema en esta región, los animales son bastante mansos. Las ventajas de Manu Wildlife Center son sus escondites o plataformas, y una buena red de senderos en el que es bastante fácil de seguir a los animales, especialmente los monos. Aparte de una plataforma que está en una ceiba enorme (!), hay también una plataforma cerca a una colpa de mamíferos y un escondite cerca de una colpa de guacamayos. Al caminar por las escaleras hacia la plataforma en la ceiba gigante, uno se da cuenta cuánto uno se pierde caminando sólo en el suelo del bosque. En la plataforma, tuvimos una excelente vista, aún lamentablemente no vimos mucha vida silvestre como se esperaba (probablemente era mala suerte; si una bandada mixta de aves hubiera pasado hubiera sido impresionante sin duda). La colpa de mamíferos era bastante lujosa con colchones y mosquiteros donde los visitantes podían esperar o dormir un poco hasta que llegara un animal. Un grupo de turistas que estaba allí junto con nosotros no tenuvieron demasiada paciencia y se marcharon después de pocas horas. Un poco más tarde (sin dormir ni un segundo porque estaba disfrutando de los increíbles sonidos de la selva por la noche y quería estar listo para lo que venga) tuvimos la suerte de observar a un tapir (Tapirus terrestris), un armadillo gigante (Priodontes maximus) y un puercoespín (Coendou prehensilis). En el camino de regreso al albergue tuvimos la oportunidad de ver la vida nocturna de la selva tropical. Un paseo nocturno por la selva es absolutamente recomendable, observando atentamente lo que se esconde en las plantas a lo largo del camino. El escondite en la colpa de guacamayos es sin duda un punto culminante de Manu Wildlife Center. El escondite era antiguamente un catamarán flotante en una rama desconectada del Río Madre de Dios. Con el tiempo se ha secado gradualmente con la consecuencia de que ahora el catamarán es un escondite fijo en la tierra. Aunque la posición del escondite ya no es flexible como antes todavía ofrece excelentes oportunidades para ver varias especies de Loros y Guacamayos, que visitan la colpa regularmente. Era particularmente interesante ver la interacción entre diferentes especies de Loros y el comportamiento de las parejas de Guacamayos. Para la fotografía un buen teleobjetivo es absolutamente necesario, visto que la distancia entre el escondite y la colpa es aproximadamente 70-100 m. El objetivo de 400 m más 1.4 x teleconversor que llevé no era lo mejor para esta ocasión. Mientras que uno observa a las aves se sirve el desayuno.
El albergue en sí también era muy agradable. Oropéndolas, algunos Picaflores e incluso una tropa mixta de diferentes Tamarines
(Saguinus fuscicollis y Saguinus imperator) eran visitantes regulares. Un día, tres tamarines intentaban de abrir un fruto
de cacao que estaba creciendo en un árbol en el jardín. Primero intentaron arrancar la fruta. Como no les salía,
trataron de hacer un agujero mordiendo en la piel del cacao. Duró bastante tiempo, pero finalmente lo lograron y se comieron el interior
carnoso del cacao, sacándolo con sus bracitos. Paseando por la red de caminos en el alrededore del albergue, vimos varias veces una tropa de Mono Araña (Ateles paniscus). Un día un Mono Araña adulto estaba jugando con un juveníl mientras que el adulto estaba cogiendose a una rama usando sólo su cola prensil. Observamos también cómo una hembra estaba ayudando a su cría pasando de rama en rama haciendo puentes con su cuerpo entre ramas muy distantes. En una ocasión una grande tropa mixta de Mono Ardilla (Saimiri boliviensis) y Mono Capuchino Blanco (Cebus albifrons) pasó nuestro camino. También estas dos especies frecuentemente forrajen juntos, a veces acompañado también por un Gavilán Bidente (Harpagus bidentatus), que también vimos acompañar a la tropa, buscando animales espantados por la actividad de los monos. Otro punto a destacar de Manu Wildife Center es la cocha Blanca, un pequeño lago aproximadamente media hora del albergue. Este lago, un antiguo recorrido del río Madre de Dios, fue uno de los mejores lugares para la fotografía de la fauna salvaje, con muchas aves (por ejemplo, varias especies de Garzas y de Martin Pescador, aves rapaces y el Hoazin (Opisthocomus hoazin), que siempre es abundante en los lagos. Todos los animales eran muy mansos. En un catamarán flotante nos pudimos acercar silenciosamente a tan sólo dos o tres metros del caimán negro (Melanosuchus niger) y de algunas Garzas (Tigrisoma lineatum) que normalmente son muy tímidas. Por supuesto, eso era sólo posible porque todos estaban realmente silenciosos, disfrutando esta experiencia maravillosa. Después de algún tiempo empezó a llover, pero por suerte había traído una bolsa de plástico para cubrir la cámara y la lente. Sino hubiera perdido muchas buenas oportunidades para tomar fotos. En el camino de vuelta al Manu Wildlife Center vimos también al caimán blanco (Caiman crocodilus) que estaba echado en una orilla del río. La vuelta a Cusco Al final, después de tres días en el Manu Wildlife Center era hora de regresar al Cusco. Nos dirigimos en bote a una pequeña pista de aterrizaje cerca del albergue y esperamos al avión de tipo Cesna. Nos pesaron junto con el equipaje y en caso de sobrepeso, ibamos a volver al Cusco nosotros, pero el equipaje tomaría el próximo vuelo al día siguiente. Mirando hacia abajo en la selva me imaginaba la cantidad de vida que estaba allí, escondido en el mosaico de verdes y naranjas (los árboles con flores). En los últimos seis días habíamos visto una cantidad y diversidad increíble de vida, ecosistemas y especies, aunque en tan poco tiempo sólo es posible obtener una vista instantánea de la selva peruana. Teniendo esto en cuenta, es difícil imaginarse cuánto todavía está escondido debajo de ese inmenso techo verde esperando a ser descubierto. → Mira todo los fotos de este viaje Literatura recomendadaActualmente (2010) la mejor guía de las aves del Perú: Schulenberg T.S., Stotz D.F., Lane D.F., O'Neill J.P, Parker T.P. 2007. Birds of Peru (Princeton Field Guides). Princeton University Press, 656 páginas. Una guía buena de mamíferos neotropicales: Emmons L.H. and Feer F. 1997. Neotropical Rainforest Mammals: A Field Guide. University of Chicago Press, 307 páginas. Un libro excelente, obligatorio para todos los interesados en la ecología de las selvas tropicales: Kricher J. 1999. A Neotropical Companion: An Introduction to the Animals, Plants, and Ecosystems of the New World Tropics. Princeton University Press, 451 páginas. Un libro en español y inglés sobre el Parque Nacional del Manu: MacQuarrie K. and Terborgh J. 1998. Peru's Amazonian Eden: Manu National Park and Biosphere Reserve. 2nd ed. Francis O. Patthey & Sons, 320 páginas. (Fotos: A. Bärtschi) Consideraciones prácticas
Fotografía: Como la electricidad no está disponible las 24 h (y los enchufes pueden estar ocupados) es una buena idea llevar suficientes
pilas (recargables). Yo tuve mala suerte con mis pilas recargables, que frecuentemente pierden la tensión después de poco tiempo.
Visto que las pilas recargables normales ya tienen sólo un voltaje de 1.2 V en lugar de 1.5 V, los míos ya eran inutilizables
después de dos días solamente (tal vez debido a la alta humedad causando una pérdida de voltaje acelerada). A partir de ese
viaje siempre utilizé pilas "Eneloop" que puedo recomendar absolutamente. Pierden el voltaje sólo muy lentamente (después de
meses) y nunca más tuve problemas con pilas, incluso en la selva durante la temporada de lluvias (algunos años después de visitar
el Manu). Aunque una semana probablemente no es suficiente para que crezcan hongos en las lentes o en la cámara, nosotros llevamos bolsas
de plástico con sílica gel para dejar secar todo durante la noche. Para viajes más largos hay otros métodos
recomendables (encontrará mayor información acerca de este tema en la web). Una lente con estabilizador y un flash es muy
útil para tomar fotos de animales en la selva, donde es bastante oscuro. Nosotros llevamos también un trípode que era útil
para la fotorafía en los escondites. Por último, llevar un disco duro para guardar los fotos puede ser indispensable.
Turismo ecológicoNotablemente todos los albergues ofrecen una forma ecológicamente sostenible de turismo. En Manu Wildlife Center nos dijeron por ejemplo, que los alimentos son importados de Cusco y no se caza nada (ni pescado), a pesar de que sería mucho más fácil. También la basura es transportada de regreso a Cusco. Eso, evidentemente, aumenta los costos de funcionamiento del los albergues, pero estoy seguro que la mayoría de los admiradores de la vida silvestre apoya a esta forma de turismo. |